El matador de toros Manuel Escribano ha completado un fin
de semana dedicado a las acciones benéficas; el sábado día 3, con un tentadero
abierto al público en la madrileña ganadería de los Hermanos Pérez Villena y ayer domingo, con la entrega de juguetes a
los niños de la planta de Oncología de
un hospital madrileño.
Más de doscientos aficionados
que llegaron a la finca en autobuses habilitados por Manuel Escribano
acompañaron al matador de toros en la jornada del sábado donde el diestro tentó
dos vacas de procedencia Marqués de Domecq. A cambio cada espectador debía llevar
un juguete que Escribano ofrecería el domingo a los niños enfermos de cáncer.
El Doctor Luis Madero, Jefe del Servicio de Onco-hematología del Hospital
Infantil Niño Jesús de Madrid, José Luis
Blanco, representante de Taurodelta y la familia Pérez Villena, entre otros, dieron categoría a un acto emotivo y
solidario.
Cientos de regalos, una jornada
de toreo en el campo y Escribano que fue
entregando personalmente los juguetes a los niños enfermos de entre dos y
quince años invitando a todos ellos a que cuando abandonen el hospital
acudan a ver torear al diestro en las ferias de sus ciudades.
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